Si es posible, sigue la regla 3-2-1-1-0. Guarda tres copias de tus datos en dos tipos de soportes diferentes. Una de las copias debe guardarse fuera de casa. También deberías tener una copia offline. Al restaurar los datos no debe producirse ningún error.
Muchas aplicaciones tienen sus propias funciones de copia de seguridad o exportación que puedes utilizar. También deberías pensar en aplicaciones importantes como las de 2 factores o los gestores de contraseñas cuando hagas la copia de seguridad. Normalmente, la configuración se puede exportar fácilmente desde ellas.
Si es posible, utiliza software de copia de seguridad de código abierto como "Neo Backup". Sin embargo, suele requerir derechos de superusuario (root). Una simple copia periódica de tus datos más importantes en una memoria USB también es un buen comienzo.