Un comportamiento prudente en el espacio digital es crucial para proteger tu propia privacidad y seguridad. Puedes minimizar el riesgo de uso indebido de datos y de ciberataques siendo consciente al manejar datos personales y adoptando medidas de protección específicas, como el uso de claves de acceso, la autenticación de dos factores y el almacenamiento cifrado en la nube. La eliminación proactiva de cuentas no utilizadas y la comprobación periódica de fugas de datos son igualmente importantes para mantener el control sobre la información sensible. Las tecnologías respetuosas con la intimidad, como Tor y los front-ends alternativos, así como el cifrado del correo electrónico, ofrecen capas adicionales de protección.