Utiliza sólo adaptadores de corriente y cables de carga en los que confíes. Marca el cable y el adaptador de corriente para evitar que puedan ser sustituidos.
Más información
Si es posible, utiliza un cable USB sin función de datos para la carga. Los cables manipulados o las tomas USB de hoteles, autobuses o trenes podrían leer datos o instalar software no deseado. Si no estás seguro, puedes simplemente apagar el teléfono durante el proceso de carga. De este modo, no se podrá instalar ni leer nada y seguirá cargándose.