Empresas como spitch.ai ofrecen a bancos y otras empresas la oportunidad de complementar su atención al cliente con IA. Esto debería eliminar la necesidad de pedir contraseñas, fechas de nacimiento o verificaciones similares durante una llamada telefónica. En el futuro, el análisis automático de la voz será todo lo que se necesite para reconocer de forma fiable a los clientes por teléfono. El patrón de voz será almacenado de forma centralizada por las empresas de IA. Esto se vuelve problemático cuando las autoridades investigadoras utilizan estos datos almacenados para desanonimizar a las personas en mensajeros basándose en su voz, por ejemplo.